Reflexiones por circunstancias.

-Los que me habéis leído algo sabéis que tengo ciertas taras, comunes o no. A lo de "comunes" me refería a normales...

-Ando un poco "mosca", porque, después de saber que tengo el cerebro taladrado y hecho añicos, he querido indagar, con ayuda del dueño de un cibercafé, para buscar a parte de los causantes de mis heridas cerebrales. Su ayuda ha servido de poco. El Parkinson, su inexactitud en las fechas y su ferviente declaración de cubano-republicano han hecho que me busque la vida, ahondando en este mar de neuronas, que más parece una lata de migas de atún que un cerebro humano.

-Con mis pocas ayudas del ayer, recuerdos punzantes, caras maquiavélicas que me persiguen sin ningún fin, etéreos cánticos con alegatos infantiles y/o circenses, falto de cordura, vamos, he conseguido licuar, sin rueda de reconocimiento, a cinco sospechosos de mi decrecimiento neuronal. Espero que este sea el timbre que suena en mi subconsciente.

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1.-Torrebruno

Por aquel entonces andaba falto de cariño, mis padres estaban muy ocupados con mis hermanos, uno no comía, el otro se comía las molduras de las esquinas,..., sufrí en silencio a Rocky Chaparro, sus estupideces, sus tigres, su acento, el dolor cervical que me infringía. Más tarde supe que ese dolor provenía del tronco-encéfalo. Este muerde-piruletas me destrozó la infancia con sus disfraces. Me hizo mucho daño, no tanto como a Agatha Ruiz.

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2.-Joe Rigoli

Este soñador inventó caras en la TV que no se habían visto hasta entonces. Gestos masilofaciales que una llama del Perú estaría dispuesta a copiar. Chistes baratos de cuñado, figuración y germen. Fue aplaudido 15 años después, lo de los gestos con la boca ( si eres inteligente, sabrás de lo que hablo). Me dañó severamente el cerebro.

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3.-Jordi LP

Con la llegada de este esqueje unicelular, me di cuenta que no estaba tan roto para desempeñar trabajos que no requisiesen arduos conocimientos. Podaba geranios muertos, limpiaba cacas de gato y me defendía habilmente en mis deseos onánicos. Las chaquetas e indumentarias del colega me segregaron pensamientos nocivos para mi bienestar, al tanto que era consciente de lo bueno y lo malo. La entrada de este personaje en escena me profirió que hay gente más tonta que yo en el mundo. Rápidamente, me fui a por mi pijama de elefantes a hacerme una paja, pensando, obviamente, en Torrebruno.

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4.-Mariano 1´85

Aquí hay un stand by , cierta mejoría, con colacaos, sopas de letras y Castillo de Gredos a mansalba. Vi al sapo este y creía que crecía otra vez. Ese humor con olor a cecina, aspero, rancio, dejando caer, gracioso (?). Principiante en las lides, me someto al fulgor de su chascarrillo, palabreico, sereno y serio, acojonante. No remite en mi nada saludable. Vomito constantemente. Será el arroz? Es Mariano, dijo mi madre, tiene la misma gracia que uno que se caga con liquidito en la puerta de un velatorio. Le di las gracias a mi madre, otra vez estaban guiando mi masa gris, toda mía, pero no propietario REAL. Este cangajo me hizo daño.

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5.-Loreto.

Dotada de una sofisticada risa falsa, se hizo un hueco en el grupo de abreanos (aún no existía la palabra "friki") de nuestras pantallas.

Tu pantalla "Amiga" (como la nombraban ella y alguno más, Jordi lp, for example), nos laceraba con curvas sinuosas, biquinis coloridos y concursos insulsos, faltos de contenido.

Las sobremesas con esta yegua eran trepidantes, no sabías cuando ibas a vomitar; las noches, fijo te dejabas medio cerebro cabilando quién era el que había perpetrado semejante atraco audiovisual. Recuerdo un día haber arrojado nueve nécoras empanadas que me comí antes de ver el super programa "Goles son amores". Lástima de masa pensante, a día de hoy la reduzco a cuatro anuncios y poco más.

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Casi recuperado de lo de anteayer, me encuentro con otro grupúsculo de alzaantorchas de lo cutre, reviviendo la pesadilla que generó mi abundante medicación. Intento salir de lo real y me prostituyo con cincuentones barrigudos en los descampados. No me soluciona nada más que el bolsillo. Recojo a mi novia, viuda y enferma, y charlo con ella de lo loco que está el tiempo. En eso no meteré la gamba.

Mis días se resumen en pensar que mis fantasmas del pasado no volverán..., sino, me voy al descampao.

Salud a tod@s.